Cordeles
Una de las cosas mas interesantes que se puede encontrar en la fiesta Orhipean es la elaboración de “cordeles de Bainetas” llamadas así a la alubia verde.
Sembradas por San Isidro se empiezan a recoger a finales de julio. Hoy día todo se congela para el invierno pero antiguamente había otro sistema, con un curioso proceso, el secado.
Una vez recogidas las “bainetas” se despuntan ( quitar los dos extremos). Luego, por la parte mas gruesa y con una aguja lanera, se van “cosiendo” en un hilo grueso, teniendo cuidado que no se toquen entre sí.
Después se escaldan en agua hirviendo y se cuelgan para que se sequen, casi siempre en el techo de la cocina por eso los maderos estaban llenos de clavos.
Cuando están bien secas se atan de un extremo del cordel y se guardan en manojos en un sitio bien seco. La humedad las estropearía. Secas pueden aguantar casi un año. La diferencia entre la alubia fresca y seca es, sobre todo, la textura y el sabor.
Antes de comerlas se cortan y se ponen a remojo para que se hidraten. Luego se cocinan y ¡¡a comer!!
Hoy día, aunque la mayor parte se congela, en algunas casas se sigue haciendo parte de la cosecha “en cordeles”.