La tarea más importante que se hacía era el pan. En todas las casas había una habitación llamada “LA MASANDERÍA” en la que se encontraba también el horno y que estaba destinada solo para hacer el pan.  ¡Lástima que ya no se conserve ningún horno…!.

Normalmente se amasaba dos veces a la semana dependiendo del  tiempo y la gente que en cada momento hubiera en casa. De mayo a septiembre los pastores que pasaban el invierno en la ribera subían con las ovejas al puerto, así que se juntaba toda la familia.

Seguramente que el día de masada era muy agradable para todos porque se comía el pan tierno (el único) y porque las “amas y amorzias”(abuelas) les hacían a los crios uno bollos pequeños a los que les metían una magra o un trozo de txistor y al horno.¡¡tenía que ser una delicia!!...

El pan era también fundamental para “LA ORDEA” (dar una cosa a cambio de otra). El que se podía permitir hacer mas cantidad que la necesaria para su consumo lo cambiaba por otros productos de primera necesidad como azúcar, aceite, café, sacarina….que se traía del mercado de Donibane o de contrabando.